Se ve a un ratón capturado en una jaula

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Vamos a explicarte en que consiste la desratización. Enumeraremos los métodos que se emplean. También hay que mencionar que forma parte del certificado DDD, el cual expedimos. Así pues, junto a desinsectación y desinfección, son las cualidades del mismo.


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¿Qué es la desratización?

Mediante una serie de métodos y/o acciones, conseguimos eliminar la plaga de ratas, ratones u otros roedores. En zonas urbanas es bastante habitual la presencia de estas plagas, por ello es importante contactar con un profesional si tienes un problema en casa o en tu negocio. Los precios de la desratización varían en función de la superficie. Contacta con nosotros para ofrecerte un presupuesto.

Métodos de desratización

Existen diferentes tipos de desratización, los podemos dividir en desratización pasiva y desratización activa. Vamos a enumerarlos y explicar en que consiste cada uno.

Métodos activos

Se aplican técnicas para el control de plagas con métodos químicos, físicos o biológicos. En este caso limitan la población de ratas, ratones y otros roedores. Debido a ello, la presencia de estos disminuye notablemente o desaparece totalmente. Se denomina desratización activa. Estos son:

Método biológico

Al igual que con otras plagas, de esta manera limitamos la capacidad de reproducción de esta. Como resultado, el número total de especímenes se reduce notablemente. Estos son:

  • Introducción de especie depredadora, como gatos, hurones, etc…
  • Cebos esterilizantes, eliminando la posibilidad de reproducción.
  • Eliminación mediante epidemias controladas.

Método químico

Con el uso de rodenticida, comúnmente conocido como raticida o veneno para ratas, se elimina la plaga con la ingesta del cebo. De acción anticoagulante provoca la muerte del roedor. También se pueden aplicar fumigantes o repelentes de roedores.

Método físico

Los más utilizados son las trampas. Generalmente de tipo adhesivas y cada vez más en desuso, las trampas de resorte. Por si solas no son suficientes para controlar la plaga, ya que actúan de forma puntual y selectiva. La combinación de estos métodos es la mejor forma para garantizar la desaparición de estos animales.

Métodos pasivos

A diferencia de los anterior, con estos evitamos que los roedores entren en una zona o lugar. Por consiguiente no eliminamos la plaga, sino que evitamos que invada nuestro espacio. El más común es la instalación de mallas de un grosor de 1 cm para evitar roturas.

También podemos limitar la proliferación evitando facilitar la vida de estos. Mantener las estancias limpias, libre de alimento o restos de agua, impedirá que vivan en estas. Los roedores no pueden estar más de 48 horas sin comida. Igualmente importante para la desinsectación.